A Kirsty (Ashley Laurence [ 28 de mayo de 1966 ], su desgraciada aventura con los cenobitas la hace despertar en una institucion psiquitrica, y descubre que nadie le cree. De su cuadro clinico se ocupara el doctor Channard (Kenneth Cranham [ 12 de diciembre de 1944 ] ) y su asistente Kyle ( William Hope [ Montreal, 1955 ] ). Sin embargo, para la pobre Kirsty las pesadillas aun no han terminado, pronto, a su vida regresaran sus viejos conocidos: los cenobitas y no solo eso, tambien regresara su madrastra Julia ( Claire Higgins [ 10 de noviembre de 1955 ] , ademas, Kirtsy tendra la oportunidad de conocer el mundo cenobita.
Fue durante la epoca en que Hellraiser se encontraba en post produccion, en que la New World Cinema le dio luz verde a la secuela. para el primer film, Clive Barker habia desarrollado otras historias sobre los cenobitas, aunque los origenes de los mismos nunca habian sido explorados. Para esta segunda parte queria dejarle en claro a la audiencia, de que los cenobitas alguna vez fueron humanos y que sus propios vicios les habian llevado a convertirse en demonios. En cuanto a los actores, Andrew Robinson ( 14 de febrero de 1942 ) se rehuso volver a interpretar su personaje, lo cual obligo a reescribir el guion. Tanto Randel como el resto del equipo de produccion creyeron que Hellbound seria la ultima vez en que apareceria el personaje de Pinhead ( Doug Bradley [ 7 de septiembre de 1954 ] y que el personaje de Julia continuaria con la franquicia, pero la actriz Claire Higgins decidio que no queria repetir a su personaje, asi como trampoco queria volver a trabajar en ninguna otra secuela de la saga. Sin embargo, el hecho de que la actriz no quisiera volver, no resulto ningun problema, la popularidad de Pinhead fue tal que aquel se convirtio en el personaje recurrente de la franquicia.
Se pidio por mas, se dio mas. La pandilla regresaba para continuar dando sustos y a la misma se le unia un nuevo cenobita. En la primera habia un cubo, aqui, el doctor Channard tiene en su posesion tres cubos mas. Una continuacion digna, que se sirve de momentos breves para hacer entrar en tono al desmemoriado o al que se perdio la primera entrega. A su vez el producto conseguido aqui, continua en la misma onda: perturbador y oscuro, en donde se exploran dos mundos, uno de ellos mas mundano y, quizas, mas aterrador: el manicomio, para luego pasar a ese otro mundo lleno de imagenes de pesadilla, ya sabemos cual. En su segunda entrega, la saga cenobita demostro que continuaba estando fresca y vital, con unos cenobitas deseosos de seguir explorando.